4 mar. 2008

Fallas en la comunicación.

Uno de los elementos clave cuando de comunicación se trata, es que la información haya sido transmitida con efectividad. Parafrasear, pedir que nos repitan lo que entendieron de lo que dijimos, confirmar, hacer preguntas de chequeo son algunos de los elementos de los cuales podemos servirnos para determinar la efectividad en la transmisión de la información. Cuando no se recibe el mensaje, con la misma intención que lo enviamos, las consecuencias pueden ser muy negativas. Veamos el siguiente ejemplo:

Un tipo llega a su casa y le dice a su mujer:
-Te cuento Julia, que vengo de ver una película para adultos, y no te imaginas la cantidad de locuras que allí se ven.
-¿Cómo así Cucho?... ¡Cuéntame!...
-No te imaginas cómo se quejan las mujeres cuando hacen el amor... Sabes, yo creo que eso nos falta para ponerle más sazón a nuestro matrimonio.
-¿Te gustaría que yo me queje, Cucho?
-Sería recontra chévere, Julia. ¿Por qué no lo intentas?
Y efectivamente, la pareja se dispone a poner en práctica la novedad. Esa noche el hombre empieza a acariciarle los hombros a la mujer y ella le pregunta:
-¿Empiezo a quejarme?
-No, todavía no Julia.
Continúa acariciándole la cintura, las piernas y la esposa nuevamente le pregunta:
-¿Ahora ya me quejo?
-Espera un poco más.
A los 20 minutos el hombre sube a donde tiene que subir y empieza a hacer lo que tiene que hacer y le dice a su mujer al oído:
-Ahora Julia, ahora ¡¡¡¡¡comienza a quejarte!!!!!
- ¡¡¡¡Ay Cucho, los niños están cada día más insoportables; la plata que me das para el diario no me alcanza; la bebé necesita zapatos nuevos; tu madre llama para joder todos los días; se acabó el gas; tenemos que comprar un refrigerador nuevo; ya no sé qué cocinar!!!!! ¿¿¿¿SIGO QUEJÁNDOME CUCHO????

1 comentario:

JP dijo...

jajajajaja

Genial!!!!!

Caí como un bobo!