7 feb. 2010

Más allá de la noche que me cubre
negra como el abismo insondable,
doy gracias a los dioses que pudieran existir
por mi alma invicta.
En las azarosas garras de las circunstancias
nunca me he lamentado ni he pestañeado.
Sometido a los golpes del destino
mi cabeza está ensangrentada, per o erguida.
Más allá de este lugar de cólera y lágrimas
donde yace el Horror de la Sombra,
la amenaza de los años
me encuentra, y me econtrará, sin miedo.
No importa cuán estrecho sea el portal,
cuán cargada de castigos la sentencia,
soy el amo de mi destino:
soy el capitán de mi alma.


¿Qué se puede decir de estas palabras?, cuando las leemos sin duda alguna nos dan ánimo, nos hacen sentir poderosos y nos confirman que somos creadores de nuestras circunstancias. ¿Nos puede servir para algo el tener presente estas palabras del poeta William Ernest? A mí me gustan muchísimos los versos y los consejos que nos dan. Este poema habla del triunfo, de cómo podemos vencer las adversidades que nos oprimen, de cómo aprobar esas pruebitas que nos pone la vida y que muchas veces nos asfixian y hacen sentir que no podremos superar este nuevo obstáculo.

Si estas palabras hubiesen llegado a mí en otras cirscunstancias o por otro medio, quizás no tendrían el impacto que ejercen ahora. Recién las descubrí ayer en la noche y siento que me van a servir muchísimo para este momento de mi vida en el que debo aprender a crearme mejores circunstancias y en el que la necesidad de mejorar me están invitando a hacer algo, a moverme y a evolucionar hacia mejores estadios de mi ser y a concretar todos esos hermosos poryectos con mi Marmota del alma.

Durante 27 años estas palabras fueron la inspiración del prisionero 46664. Este hombre que encarcelaron en Robben Island, puso en práctica aquello de que "podrán encerrar mi cuerpo pero no mi espíritu". Este gran hombre que llegó a ser Presidente de su país, democráticamente electo y que trajo al pueblo un mensaje de progreso y reconciliación es uno de los personajes de nuestra historia contemporánea a quien más admiro y de quien me gustaría saber un poco más.

Obviamente se trata de Nelson Mandela, el Madiba del pueblo surafricano que con sabiduría, amor, paciencia, estrategia y un increíble don de liderazgo pudo hacer grandes cosas por un país que estaba sumido en las consecuencias del apartheid.

Es que ayer fui con Marmota y una amiga (a quien aún no he decidido con que nombre de la fauna bautizaré a fines de estos trazos) a ver "INVICTUS" la más reciente película de Clint Eastwood protagonizada magistralmente por Morgan Freeman y Matt Damon. ¡Qué buena película! es que aún no puedo creer que haya superado todas las expectativas que tenía con ella! los tres salimos extasíados de la sala. Marmota quedó "impactado" con el film y yo salí buscando hidratación oral porque tantas lágrimas acabaron con las reservas de líquido que mi cuerpo guardaba.


A manera de antecedentes puedo decirles que hace algunos años atrás había escuchado hablar de Mandela, cosas muy generales que cualquier ser humano conoce, bueno cualquiera que se preocupe por conocer el mundo donde vive. Lo cierto es que en una oportunidad, y para acompañarme en uno de mis viajes y en las esperas de los aeropuertos de este país donde un vuelo puede salir hasta con 12 horas de retraso (y más) compré una revista Selecciones dónde le hacían una entrevista a Mandela precisamente sobre cómo había superado su encarcelamiento y todo el reportaje y la entrevista iban enfocados a sus años entre las rejas. Desde ese momento puede decirse que me hice fan de un líder atípico, que siendo del pueblo no es populista. Un buen gerente, buen hombre, buen lider, buen jefe y buen "planteador" y "alcanzador" de metas. Es decir que si bien no soy un biógrafo de Mandela, si conozco al personaje y su trayectoría. Y de paso su impactante mensaje y manera de llegar a las personas.
Pues, hace poco le comentaba a Marmota que si decidieran hacer una película de Mandela me encantaría que Morgan Freeman lo representara. Yo sin saber que ya existía "Invictus" me quedé gratamente sorprendido cuando me dice "Pero, si ya la hicieron, ya debe de estar por llegar al cine". No podía creerlo, y a los pocos días vemos el trailler de este film que sin duda alguna tienen tanta tela que cortar que en unas pocas líneas no se puede hablar todo lo que se merece.

No se trata sólo de una película, ni siquiera es una oda a "Madiba". va más allá es una lección para los líderes del mundo. Su mensaje de unión y reconciliación es sorprendente. La visión de Eastwood al poner como tema central el mundial de Rugby de 1995 está acertadísima. No vemos allí a un presidente que apoyó a una selección deportiva nacional, sino que vemos a un líder que supo crear las mejores circunstancias para favorecer a su pueblo. Vemos a un líder que estaba claro en que el progreso, el desarrollo o la evolución sólo serán posibles con el aporte de todos. Vemos a un líder que no llega al poder haciendo borrón y cuenta nueva, sino que se preocupó por aprovechar lo mejor de lo que ya existía y de incluir grandes innovaciones. El discurso que le da a los trabajadores del despacho presidencial es sencillamente magistral, una lección para algunos líderes de por estos lados. Vemos a un líder capaz de reconocer las fortalezas y debilidades de su gente, preocupado porque quienes lo rodean no se sientan "invisibles".

Bueno, regresando a la película, no puedo dejar de mencionar que la historia está muy bien contada. Las actuaciones son dignas del compromiso que representan. Morgan Freeman nos demuestra por qué es uno de los mejores actores que ha existido en la historia del cine. Sus ojos hablan por sí solos, su expresión corporal, esa manera de hablar y de meterse en la piel del personaje que representa es sencillamente insuperable.
Matt Damon se luce en esta obra. Transmite el mundo emocional de su personaje de una manera muy convincente. Sin lugar a dudas demuestra que se merece un sitial de honor entre los grandes del séptimo arte. Tiene talento de sobra (además de otras virtudes que se ven muy bien en pantalla grande). Su personaje está muy bien logrado.



Si se sienten identificados con la filosofía de liderazgo de Mandela, vayan a verla.
Si les apasiona el tema del liderazgo, de cómo inspirar a los demás, de cómo mover a otros a lograr grandes cosas, vayan a verla.
Si les preocupa el crecimiento personal, si quieren ser cada día mejores personas, vayan a verla.
Si sienten que la vida es algo más que lo material y que debemos trascender como seres humanos, vayan a verla.
Si les gusta el buen cine, vayan a verla.
Si ya están cansados del cine comercial y de los personajes con pieles azules, llenos de efectos especiales pero sin argumentos ni historias sorprendentes, vayan a verla.
Si les gustan las historias que conmueven, que nos hacen reflexionar y que dejan aportes importantes en nuestra vida para acercarnos al ser ideal que tenemos de nosotros mismos, vayan a verla.
Si les gusta inspirarse con éxitos e historias de la vida real, vayan a verla.
SI están convencidos de que pueden hacer un futuro mejor y de que son responsables de todo cuanto les pasa, vayan a verla.
PD: Ah, se me olvidaba. No les voy a contar al final pero si les voy a sugerir que se queden a ver los créditos porque están acompañados con las fotos de las personas reales. Los jugadores reales, el Mandela real, etc.

1 comentario:

Graciela dijo...

Hola, no habla de eso el poema, peor es muy bello que lo hayas subido. Gracias. Graciela